domingo, 23 de mayo de 2010

En que se ha equivocado, señor Zapatero

Lo entiendo señor Zapatero, se que la única forma que ha encontrado su equipo de asesores de recortar los 15.000 millones de Euros que le pide, mejor dicho le exige, la Unión Europea y de rebote Estados Unidos, es recortar el sueldo de los funcionarios y las pensiones –no se preocupe, al resto ya nos lo bajarán nuestras empresas con la excusa de la crisis– y parar las obras públicas.
También entiendo que esté cabreado con el comportamiento cobarde del PP, que si estuviera en el gobierno tendría que haber realizado las mismas políticas que usted hace ahora o incluso peores y les habría pedido patriotismo a ustedes para apoyarles –el mismo que ahora les niegan.
Por último entiendo que España es un país tremendamente jodido de gobernar, desde los años sesenta nos hemos basado en el turismo y en la construcción, principalmente en la costa, aunque no sólo en esa, y si alguno de estos elementos falla, nuestra economía se cae, y cambiar esa economía no es cosa de cuatro años, ni de ocho ni de dieciséis ya puestos.
Hasta aquí la zanahoria, ahora el palo.
Empecemos por el final, la crisis del ladrillo se veía venir, lo único que no se sabía era cuando. Podía haber sido en el gobierno de Aznar, pero no, fue en el suyo, y sabiendo que iba a pasar usted no se atrevió a tomar unas medidas para evitar que doliera tanto: imponer condiciones más duras para conceder hipotecas –aumento de las garantías del hipotecado–, poner condiciones más duras a los bancos, solicitar avales a las constructoras, etc. Era más fácil cobrar el dinero de los impuestos correspondientes y usarlo para demostrar lo espléndido que era usted que arriesgarse a adoptar una medida impopular. Una medida que hubiera dejado a "Sebas, el vigilante jurado" sin poder comprarse su apartamento en Marina D'or y refunfuñado porque el gobierno malo ponía unas leyes que no le dejaban comprarse ese apartamento, el que ahora mismo ha perdido por no poder pagar la hipoteca. Al igual que mucha gente que se ha comprado su primera casa, no su apartamento en la playa, y la ha perdido por comprarse casas que claramente superaban su nivel adquisitivo.
En segundo lugar están los cuatrocientos Euros que nos devolvió a todos los españolitos con nómina. Cuando oí su propuesta en las elecciones me fui al baño, me metí los dedos en la boca y vomité. Ese dinero de poco nos ha servido, a lo mejor para comprarnos una nueva televisión made in china, favoreciendo la industria china no la nuestra. Si en lugar de una medida populista, casi de extrema derecha diría yo, se hubiera invertido en educación, sanidad,seguridad, infraestructuras, se habría dado trabajo a profesores, médicos, policías y trabajadores de cualquier grado españoles, incluyendo los obreros que construirían nuevas universidades, escuelas, carreteras... o simplemente haberlo ahorrado para peores tiempos que se veían venir y haberlos afrontado mejor.
Lo mismo que con el cheque bebe. Puede molar cobrar 2.500 euros por traer un niño al mundo, pero si alguien lo hace por esa razón es un/una inconsciente que raya en lo criminal y que probablemente luego ignoré al hijo que ha tenido. Mejor invertir en que el hospital, los médicos y las enfermeras que atienden ese parto sean buenos y sea todo gratis, que la educación de ese niño sea buena y el día del futuro pueda ser alguien a nivel internacional, y ya puestos que cuando se hable de buena educación en este país sea la educación pública y no la privada (concertada o no).
Señor Zapatero, ser de izquierdas no es bajar los impuestos y repartir dinero para que la gente se compre una televisión de pantalla plana. Las rebajas de impuestos implican disminución de la calidad de los servicios públicos, lo cuenten como lo cuenten. Ser de izquierdas es saber ajustar los impuestos para tener unos servicios públicos de calidad sin asfixiar al contribuyente. N.B. Estados Unidos tiene unos impuestos muy elevados pero la sanidad y la educación pública no existen, no es ese el camino.
Lo que usted ha hecho durante este tiempo es una política populista y no una política de izquierdas. Dudo que el PP lo hubiera hecho mejor, pero desde luego cuando los votantes decían "Zapatero, no nos falles" no se referían a esto. Usted les ha fallado.